- Área: 12100 m²
- Año: 2012
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Fotografías:Javier Callejas
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Proveedores: Cebrace
Descripción enviada por el equipo del proyecto. En colaboración con Pablo Fernández Lorenzo, Pablo Redondo Díez, Alfonso González Gaisán y Francisco Blanco Velasco.
Frente a la Catedral, siguiendo las trazas del huerto del antiguo convento, levantamos una fuerte caja de muros de piedra abierta al cielo. Todos los muros y el suelo en piedra. Con la misma piedra que la Catedral. Un verdadero Hortus Conclusus. En la esquina que mira a la Catedral, una piedra mayor, de 250x150x50, una verdadera Piedra Angular. Y cincelado en ella:
HIC LAPIS ANGULARIS MAIO MMXII POSITO
Dentro de la caja de piedra, una caja de vidrio, toda en vidrio. Como si fuera un invernadero. Con una fachada doble tipo Mure Trombe. La piel exterior de esa fachada se hace con vidrios de una sola pieza de 600x300. Unidos todos con sólo silicona estructural, sin casi nada más. Como si estuviera todo hecho de aire.
En los ángulos superiores de esta caja, aparecen los triedros completos de vidrio que hacen más visible si cabe la buscada transparencia. Lo que Mies buscaba en su torre de la Friedrichstrasse. El triedro construido con aire, un verdadero Vidrio Angular. Y gravado al ácido en el vidrio:
HOC VITRUM ANGULARIS MAIO MMXII POSITO
La caja de piedra hecha con la MEMORIA. Con la Piedra Angular enraizada en la tierra.
La caja de vidrio hecha con el FUTURO. Con el Vidrio Angular fundido con el cielo.